Por suerte o por fortuna, no tenemos el privilegio de ver nacer genios todos los días. Y es cierto que, si estás leyendo esto y como es lógico, no has vivido en el siglo de Leonardo Da Vinci. Estamos en pleno Siglo XXI y desde el hotel con carácter bastardo de toda la ciudad teníamos que tener una habitación dedicada a Da Vinci. Ese hombre que tenía la osadía de hacerlo todo bien, o al menos ser el mejor en muchos matices de su vida o de su profesión. A lo largo de la historia ha habido muchos genios, pero no todos son como Da Vinci.
En 2019 diríamos que Da Vinci era un hombre orquesta. Un hombre hecho a sí mismo y capaz de hacer de todo. Pintor, científico, escultor, inventor, arquitecto, ingeniero, escritor y tantas otras facetas que le acompañaron durante toda su trayectoria. Da Vinci era un artista esculpido a la enésima potencia. Este año, y en concreto en este mes de mayo, se conmemora el quinto centenario del fallecimiento del artista. Es por ello, que hoy abrimos la puerta de la habitación 402. Sois todos bienvenidos.
Da Vinci, un genio bastardo
Es muy difícil imaginar a alguien a quien le siente tan bien la palabra genio. Leonardo fue mucho más que el pintor de La última cena de La dama del armiño. Fue un hombre dotado de talento y que lo supo explotar al cien por cien. Le tocó vivir en una época de titanes en la que supo resplandecer. Si mezcláramos talento, curiosidad e inteligencia, sin duda, estas tres cualidades se reencarnarían (de nuevo) en Da Vinci.
“Si es posible debe hacerse reír hasta a los muertos”. Es una de las frases célebres que en Bastardo ya hemos hecho nuestra. ¿Sabes por qué? Porque en esta habitación doble lo vas a pasar en grande vengas con quien vengas. Te lo aseguramos.
La habitación de un genio
Nuestras habitaciones dobles son algo así como la mejor obra de Da Vinci. Es la mejor opción si lo que buscas es un poco de intimidad en tus vacaciones. Descifrar el código secreto de esta habitación no tiene ningún misterio porque por si no lo sabes, accederás a ella a través de un código QR. Además, te contamos que esta habitación privada cuenta con ropa de cama, artículos de aseo personal, baño completo y televisión entre otras muchas comodidades. La experiencia bastarda te espera en este tipo de habitación de hotel.
Leonardo, más de un rostro
Alojarte en un hotel en el centro de Madrid tiene sus ventajas. Aparte de tener muy cerca los monumentos y plazas más emblemáticos como la Puerta del Sol o la Plaza Mayor, si tu viaje a la ciudad coincide con exposiciones que solo pasan una vez en la vida, has tenido la mayor de las suertes. Pues esto está pasando ahora mismo. En Madrid se muestra estos días (hasta el 19 de mayo) la exposición Leonardo Da Vinci: los rostros del genio. El espíritu Da Vinci se impregna en cada rincón del Palacio de las Alhajas y la Biblioteca Nacional de Madrid. El primero se encuentra muy cerca del Palacio Real, del Monasterio de las Descalzas Reales y de la churrería San Ginés. Para ir a la Biblioteca Nacional puedes coger una de nuestras bicis eléctricas y hacer una parada en la inmensa Plaza de Colón.
Ahora que ya sabes que tenemos una habitación dedicada a este ilustre bastardo ya puedes reservarla para dormir en ella cuando tú quieras. Es una de nuestras habitaciones bastardas y tienes que venir a conocerla.