Hace mucho, mucho, pero muuucho tiempo, antes de que existieran las cañerías de desagüe, los camiones de recogida de basura, la seguridad social o incluso nuestro hostel. Cuando las enfermedades más grotescas eran tan comunes como lo son hoy los escándalos de corrupción, existían ciertos bastardos con una tradición muy particular:

Un día cada año, se abrían las puertas de la ciudad y se permitía el acceso a todos aquellos seres extravagantes, diferentes, anormales, que habían sido expulsados de ella.

En ese día, este grupo de bastardos caminaban por todas las calles de la ciudad y daban un espectáculo peripatético a los habitantes que miraban asombrados y curiosos, siempre ocultos tras sus ventanas.

Cuando este grupo ilegítimo esta en el escenario, el público se mira en un espejo deformado (¿deformado?) que refleja la crueldad, la estupidez y lo incoherente de nuestras costumbres con la esperanza de romper la rutina del día a día. Algo que permita volver a ver al mundo con una mirada diferente, más sabia y rejuvenecida. 

Autor, director y espacio sonoro

• Daniel Ramos Lorenzo

Intérpretes

• Goizane Casado
  Irene Manso
  Benito Jiménez
  Nacho Benito
  Guillermo Poyatos
  Daniel Ramos Lorenzo

Producción ejecutiva

• Carlos Lorenzo Rodrigo